José Ignacio Monedero, candidato a Secretario por ‘Compromiso Abogacía’, es socio director del despacho Monedero Gil Abogados y Asesores Financieros y durante los últimos años ha ejercido de Secretario de la Junta de Gobierno del ICAM. Además, fue presidente de la Asociación de Abogados del Estado.
Monedero abandonó, en excedencia, una brillante carrera de 18 años en la Abogacía General del Estado cuando, en el 2008, se incorpora a la firma jurídica DLA Piper. Una firma en la que permaneció hasta 2020, año en el que funda su propio despacho, Monedero-GIl Abogados y Asesores Financieros.
Licenciado en Derecho por la Universidad Complutense de Madrid y abogado del Estado en excedencia, Monedero comenzó en las Abogacías del Estado de Valladolid, Zamora, Salamanca y Segovia. En 1992 vuelve a Madrid para ejercer ante el Tribunal Superior de Justicia de Madrid en las áreas de lo civil, penal, contencioso administrativo y laboral. En 1994 dirige la asesoría jurídica del Departamento Financiero del Tribunal de Cuentas y durante más de una década (1996 – 2007) fue coordinador de la Subdirección General de los Servicios Contenciosos de los pleitos civiles y penales del Estado.
P. ¿Cómo resumirías tu perfil y trayectoria? ¿Un hito que quieras destacar?
R. Me considero una persona seria, muy profesional y muy implicado en todas las instituciones de las que he formado parte. Soy una persona absolutamente responsable y siempre con mucha ilusión en todos los proyectos que emprendo.
Creo que el mayor hito que puede existir en la carrera de un abogado es formar parte de la Junta de Gobierno del Colegio de la Abogacía. Yo tengo la suerte de haber sido durante estos últimos cinco años Secretario del ICAM. Un cargo que me ha permitido conocer perfectamente toda la Abogacía en su conjunto, desde el Turno de Oficio hasta la Abogacía de empresa y, por supuesto, ver de primera mano los pilares que sustentan y justifican nuestra profesión como una profesión al servicio de la ciudadanía.
P. ¿Qué es para ti la Abogacía y el Colegio?
R. La Abogacía es una forma de vida. Una forma de vivir al servicio de la ciudadanía, defendiendo y representando los intereses de los ciudadanos. Sin duda, una de las profesiones más bonitas del mundo.
El Colegio es una institución muy importante, que representa a la Abogacía de Madrid desde hace 426 años y que debe ser la casa de todos. Un Colegio fuerte y bien representado se traduce en una Abogacía más fuerte.
Por eso nos presentamos, para que el Colegio sea útil, eficaz, solvente, innovador e influyente.
P. ¿Cómo esperas poder contribuir al avance de la Abogacía y del Colegio si eres elegido? ¿Qué medidas o áreas esperas poder impulsar?
R. Espero contribuir al avance de la Abogacía poniendo a disposición del ICAM y de todos los colegiados mi experiencia profesional, adquirida gracias a más de 35 años de ejercicio y tratando de gestionar de la forma más responsable, eficiente y transparente posible esta institución al servicio de los compañeros.